Desde el 8 de mayo de 1945, tras la derrota y rendición incondicional de Alemania, los ejércitos de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y la Unión Soviética gobiernan el país. Como parte de su preparación para el despliegue en el territorio del enemigo, se exhiben películas de propaganda. Muchos soldados habían perdido amigos o familiares en la guerra, pero nada podía prepararles para la visión de los campos de concentración. El antiguo Reich alemán está dividido en cuatro zonas de ocupación, cada una administrada por una de las cuatro grandes potencias. Las decisiones que afectan a todo el país están en manos del Consejo de Control Aliado en Berlín. Las tropas aliadas se encuentran por primera vez cara a cara con el pueblo que ha sido su enemigo durante seis años. Algunos soldados aliados quieren venganza, pero otros tratan de ganarse a los alemanes, aunque a todas las fuerzas de ocupación se les prohíbe establecer contactos personales con la población.