El pasado 11 de diciembre, Titó, el experimentado emcee y productor barcelonés, presentó "Hondo", su primer álbum en solitario tras más de dos décadas de incesante actividad junto a su grupo Falsalarma. Un título que, pese a realizarse y lanzarse de manera independiente, no pasó para nada desapercibido, convirtiéndose rápidamente en uno de los trabajos más recomendables del año en el panorama ibérico. Razones las tiene, pero más allá de la calidad musical y las habilidades con la que desfilan sus rapeos, uno de los principales atributos que se le destaca es la honestidad y sensatez con la que se abre y atreve a nadar en nuevas corrientes emocionales a sus 43 años. Un álbum que, en palabras del mismo autor, autodescubre su lado más humano para conocer nuevas versiones de sí mismo, efecto colateral del confinamiento que le permitió reencontrarse con la música desinteresadamente para acabar firmando el primer título de una discografía solista que ya se proyecta a seguir creciendo. Cumpliéndose un mes desde el estreno, nos reunimos a conversar con Titó para conocer sus impresiones sobre el proceso y las reflexiones que le ha dejado estas primeras semanas de circulación del disco que consiguió su máxima satisfacción. Una conversación honda con el mayor de los Navarro Romero.