El fósforo es un elemento esencial para la vida y forma parte de moléculas como los ácidos nucleicos o los fosfolípidos. Sin embargo, su nombre muy probablemente nos recuerda a aquellos pequeños dispositivos que sirven para generar fuego de manera instantánea. La historia de cómo fueron fabricados los primeros fósforos es fascinante y nos lleva por un viaje luminoso, desde el uso de ácidos peligrosos en cápsula de vidrio, hasta una huelga que ocurrió a fines del siglo 19 en Inglaterra para mejorar las condiciones de trabajo de las mujeres que fabricaban fósforos. Y de ahí, a otro un viaje, esta vez por una isla que era rica en fosfatos y esa riqueza se convirtió en su perdición.