La convivencia durante siglos tan ligada al humano, ha dado lugar a que el Samoyedo desarrolle un carácter dócil y cariñoso, dando lugar a que pueda adaptarse sin problemas a la vida fuera y dentro de las casas.
Se cuenta que la perra que lideró la expedición de Amundsen al Polo Sur era una hembra llamada Etah. Esta perra sería la primera de la especie canina que pisaría estas tierras y que lo haría antes que lo hiciera el primer humano.
Gracias a su belleza, una vez más fruto de la casualidad, y a su buen carácter, la raza se extendió por todo el mundo haciéndese muy conocida y apreciada y ejerciendo, principalmente, como perro familia y compañía.