De pronto como un rayo se escucharon gritos horribles que venían de la parte de arriba de la casa.
Corrí a ver a Conrado y decirle que iría a ver lo que pasaba que se quedara a cuidar que le disparara a cualquier cosa que se moviera y subí rápidamente las escaleras.
Esta parte es la más difícil de contar, y la más difícil de creer pero se los diré.
Al llegar arriba tuve que revisar uno a uno los cuartos por qué no sabía cuál de ellos estaban, ese fue un error de mi parte.
Sabía que no había nada que me obstruyera el camino así que no tuve problemas con la oscuridad además de que ya estaba acostumbrado a ella y la luna me ayudaba.
Iba con el cuarto número 4 cuando volví a escuchar otro grito.
No era normal un grito así.
Hosted on Acast. See acast.com/privacy for more information.